Toda tu
piel dura la vida,
la vida corta,
cortísima,
sin
remedios,
sin
abogados,
la vida,
como un
acto de lluvia inesperada
o tobogán
breve,
brevísimo
beso en la boca
sin
remordimientos,
tu cabeza,
llena de
remolinos
acostada en
mi hombro
de viaje a
todos lados,
tu
respiración agitada,
siempre,
mojada por
mil preguntas,
cómo irme
amor,
cómo no
volver
a tu
mermelada de arándanos,
de tus
sueños lunares
y ese calor
de tu espalda
cuando te
abrazo.
A veces
reposas en un lago,
Otras, en un bosque cargado de pájaros,
a veces me decís
no puedo,
a veces te
digo no puedo,
sin embargo
todo es sin embargo,
cuando
lloramos nos desnudamos,
quiero
vivir,
tomar
medicamentos,
si es
necesario,
que no me
explote tanto la cabeza
este mundo
publicitario,
quiero ir
al cine cuando nadie quiera
y hacer del
teatro una casa,
quiero que
dure más la vida,
pero yo sé,
yo firmé el
contrato,
que esto tiene fecha y hora,
contigo no,
mi amor,
contigo no,
contigo
siempre
es
frambuesa en el pan,
harina
interminable,
café
inextinguible
de todas
mis mañanas.
José Cabrera
14/09/2014
No hay comentarios:
Publicar un comentario