jueves, 30 de abril de 2009

Jerarquía y Sentido de Igualdad




El ser humano, criatura creadora, necesitada de Darse Cuenta de los factores que lleva consigo mismo, desde tiempos remotos recibe influencias que al parecer son externas o lo cataloga como externas porque lo ve así, como cosa Divina, Incomprensible del todo, entonces luego viene la pregunta donde está el Mundo Exterior y es ahí cuando empieza a hablar de Misterio, no sabe de dónde viene ni a dónde quiere llegar, lo único que paso desapercibido es que vino de su propia Conciencia, de sí mismo, de su interior o mejor dicho del Interior o Intimo (desconocido por él), pero para llegar a esa conciencia de Factores Divinos y Fuerzas Creadoras Evolutivas necesita como parte micro-cósmica del Universo, como ser sensorial guiado por su percepción y visión de la Realidad, un ejemplo cotidiano, una enseñanza cotidiana, porque solo mirando a través de sus sentidos puede captar realmente la esencia de lo que acontece consigo mismo y con lo que le rodea, es por eso que el Cristo predicaba con parábolas, con metáforas que aludían a la vida cotidiana del ser de esa época, por tanto, trataré de bajar a los niveles mas entendibles esta enseñanza que recibí de Maestros que me hablan de adentro para fuera.

Hace un tiempo recorría los pasillos de una empresa, llevaba papeles a firmar, gente ataviada en sus oficinas, con la mano en la cabeza, algunos con caras de preocupación, otros con aire de descanso, no sabía dónde llevar esos documentos, de repente en una de las oficinas escucho una voz cruel y alta (como para que todos se enteren de lo que está anunciando) un reto que oí con cierta familiriadad, por no parecerme extraño a empresas anteriores, la diferencia era que en ese momento escuché palabra por palabra sin eludir ninguna, total yo estaba como tercera persona, como extraterrestre curioso por la vida humana. Luego de oírlo saqué la conclusión de que era el dueño de la empresa o el presidente de esa asociación, porque le había reclamado en sus palabras a la secretaria que lo llame Presidente o mejor Sr. Presidente y al salir de la empresa tomé el santo bus, que me devolvía al pensamiento disperso entre ventanillas, y sentado mirando la gente, la calle y el hábitat mío, pensé por largo tiempo ¿Sr. Presidente? ¿Sr. Secretario? ¿Doctor? ¿Doctora? ¿Licenciado? Licenciada? ¿Padre? ¿Madre? ¿Director? ¿Directora? ¿Administrador? ¿Ministra? ¿Ministro? y ¿El nombre que le puso su madre? y ¿El título de Ser Humano? ¿Persona? ¿Animal? Pensé por largo tiempo todas las etiquetas que usamos y en un intento de querer juzgar antes de seguir pensando, pensé y entre ese intento llegaron a mí, de mí mismo, juicios, ¡Maldita sea la jerarquía! ¡Malditas etiquetas! ¿Quién fue el gran inteligente que se quiso creer más que el otro, entonces le bajó un grado menos? ¡Malditos humanos! Por supuesto, la serie de juicios no llevaba absolutamente a ningún lado, como el bus se enroscaba entre el tráfico del mediodía, acelerando y bocinando por la ciudad, mas no iba a ninguna parte. Tranquilo, me dije, busquemos un sentido a esto. Recordé que tenía que hacer algo esa tarde y me dije que habían cosas mejores en qué pensar. Traté de pensar en otras cosas y no encontraba qué pensar, a todo instante caía en la misma ecuación que aborté segundos pasados, la ecuación seguía, intacta, ni siquiera me atreví a desmenuzarla, ni siquiera intenté, empecé a darle vuelta como vueltas daba el ómnibus. La Jerarquía ¿Para qué? para un Título social o para un Acceso social, para un Renombre o para detalle del que ya tengo, para Identificarme con no sé qué o para saber quién es mi colega, para saber quién es mi esclavo o esclavo de quién soy, para saberme qué cosa o para dejar de enterarme de qué, tiempo, me reformulaba de nuevo la pregunta, la Jerarquía, ¿Para qué? una nueva faja de respuestas cuestionables llegaban, Jerarquía utilizaría para Organizar algo, ese sería su buen uso, Organizar para que no sea un caos, miré por el vidrio sucio de la ventanilla del colectivo y dos Guardias Urbanas miraban desde una esquina, su autoridad jerárquica nada me inspiraba para dar más cuerda a mi pensamiento, Organizar, iba por un camino que no sé si era el correcto pero llevaba a otros caminos, Jerarquía para Organizar, Organizar para Ordenar, punto seguido, ordenar de orden u ordenar de yo te ordeno, necesitaba aclarar esa palabra, orden como ordenanza u orden como Ubicación equilibrada de las cosas, cada vez subía más gente al ómnibus, tuve que ceder mi asiento a una señora que llevaba por los menos seis bolsos de mercado, y el chofer con cierta delicadeza de día pesado pedía que nos ubiquemos más atrás para que haya suficiente lugar entre los que estábamos parados, Ubicar, Ordenar, Organizar, ya era otro el nivel de mis acusaciones, me reí por dentro, y por fuera recibí miradas de una persona que estaba a mi costado derecho, me sentí desubicado (risas). Después, en una tela de araña interminable me pregunté cuestiones como los porqués de las acciones que llevo, el porqué de la carrera que estudio, el porqué del trabajo que llevo, el porqué de ese porqué, cuál es mi función y mi disfunción, qué doy al mundo y qué consumo de él, iba tejiendo sobre esa tela de araña una nueva capa que descubrían sus hilos internos, me dije estás cambiando el tema, y me dí cuenta en ese mismo momento que me pasé por lo menos dos barrios del lugar dónde tenía que bajarme, con rabia traté de llegar a la puerta, me apretaban todos esos cuerpos, pise mas de un pie, recibí más de una queja, toqué el timbre y el ómnibus paró, me bajé angustiado o mejor dicho rabiado, crucé la otra acera y esperé otro bus, la espera fue larga, sólo pensaba que con razón me parecía tan largo el viaje y era por el simple hecho de que ya pasé mi parada. Me pasé de parada, pero el tema no lo había concluido, traté de retomarlo, pensé de nuevo qué doy al mundo y el mundo qué me da, cuál es mi función y mi disfunción, qué me diferencia de los demás seres y qué me iguala a ellos, la Jerarquía ¿me diferencia de los demás? o es la diferencia que existe la que me hace ser humano, la Jerarquía como medio divide la humanidad a los humanos, qué me hace igual a otro ser, pensé, miré a otro que esperaba bus, igual de desesperado que yo o peor, eso me iguala a él, miré a otro que tenía la misma marca de reloj que yo usaba, eso me iguala a él, pero qué me iguala a todos los seres, miré a un mendigo sentado en el paseo central y vi sus heridas en los pies, yo tengo zapatos dije, soy muy diferente, pero tengo dolores diarios, capaz en otros grados, a él le duelen los pies y su pobreza, a mí me duele mi inconciencia, mi falta de razonamiento en mis impulsos, el caos que genero con mis palabras, qué dolor es más importante, ninguno, me dije, todos son importantes, son dolores y creo que nos iguala a todos, desde el hambre del mendigo hasta la soledad del rico, no nos salvamos, lo que nos diferencia es la forma en cómo vivimos, y después de todo ese andar por hilos finos me pregunté si la Jerarquía sólo sirve para Ordenar algo, entonces porque es constante en todas las sociedades, porqué no se la usa una sola vez y ya, así nos ahorraríamos las etiquetas como Presidente, Doctor, etc. Y entonces olvidé que somos olvidadizos (risas), que necesitamos recordar, por eso se nos recuerda siempre, Presidente! Secretario! Doctora! Directora! por eso, pero recordar qué? ¿que tenemos que ordenar? ahí llegó el bus, antes de subir, seguía pensando mientras contaba monedas, y me dije para recordar que tengo que ordenar, no, sino para recordar la Responsabilidad que me ordena, me subí al bus y retomé mi camino, no sabía si llegar a mi destino o permanecer en ese bus, solo sabía que retomé mi camino.

Así es mis queridos lectores, cómo se desenvuelve el proceso de pensamiento, y así es como llegué a estas verdades que hoy siguen siendo verdades para mí, es el Orden el que envía la Dirección, la Dirección nos envía a los térreos caminos de la Evolución, es la Evolución la que nos muestra el porqué y ahí nace la Responsabilidad ese sentido de Orden en la Evolución, y es la Responsabilidad la que suena debajo de cada etiqueta que nombramos. La Jerarquía nos Ordena, el Dolor nos iguala, en la Evolución todos pasamos por todas las formas de dolor y comprender el dolor ajeno (amar) nos ahorra duraciones interminables de sufrimiento. Doy gracias al Maestro Interior que siempre pica con su bastón la mente de su discípulo, este texto fue inspirado por Él y expirado por mi razocinio. Salve el Orden, Salve la Dirección, Salve la Evolución, Salve la Responsabilidad!

José Fernando Cabrera.
19/03/09

1 comentario:

Raquel dijo...

Guauuu amigo que letras que razocinio!! Ojalá podamos detenernos siquiera de vez en cuando a reflexionar respecto a nuestros actos o pausas...
y en consecuencia, continuar el camino que nos es encomendado cumplir en el amparo de la orden y la ley. OGUM IE OGUM PATA CURË